Hace mucho tiempo les conté que estaba participando del Proyecto Adopta una Autora, y aunque el proyecto haya entrado en pausa, igual que yo (por todo el tema de la maestría, el trabajo, la familia), decidí en estas vacaciones cumplir con una tarea que tenía pendiente y debo confesar que no lo hice por el proyecto, lo hice por la autora, porque hemos creado una cierta relación de aprecio y bueno, debo confesar que he leído otros libros de ella y cada uno me encanta más que el anterior, así que en mi propósito de reanudar la lectura, decidí caer en los encantos de una autora que conocía y sabía que me iba a hacer sentir mucho desde la primera página. Así que, no siendo más, les presento:
Un último día conmigo, Pat Casalà
"Lúa siempre ha sido un tanto diferente al resto. Centrada en su carrera profesional nunca se ha relacionado demasiado con amistades y compañeras de trabajo. Su vida es la medicina y su marido, su único amigo desde los nueve años. Es una mujer racional, que valora siempre los pros y los contras de todas sus decisiones y nunca se deja llevar por los sentimientos. Pero encontrarse a su marido en la cama con otra trastorna todos sus esquemas.
Terminada su residencia en el hospital, Lúa decide embarcarse en la mayor aventura de su vida y se va como voluntaria en una misión de Médicos sin fronteras en una región recóndita del Congo para volver a poner su vida en perspectiva. Y allí, en mitad de la selva, conocerá a Matt, la persona menos indicada para que desate sus sentimientos y tal vez la única que conseguirá cambiar su manera de ver la vida."
Les cuento: Algo que siempre he admirado de Pat es que se prepara para escribir, investiga lo que sea necesario para garantizar que la historia tenga coherencia y eso me encanta.
Otra característica de los personajes es que siempre te hacen sentir con intensidad lo que viven. Eso me gusta, me siento realmente incluida en la historia, lo malo es que despierta demasiada sensibilidad en mi, lloré horrores, especialmente en los últimos capítulos que los devoré porque quería saber si el amor triunfaba, o era el orgullo... Demasiado sufrimiento para mi gusto, pero bueno, llorar limpia el alma...
En términos generales, me gustó mucho leer el libro, la pasión que se ve reflejada en la narración sin caer en escenas eróticas pasadas de tono o fuera de lugar. Ha sido un libro maravilloso que me recordó que el amor existe, y que no siempre pasa de una forma que no creería inverosímil por la forma como lo cuenta el libro, pero si pasa y es bonito mirar la lado de tu cama y confirmar que así es.
El recuerdo más bonito que me deja el libro es que cuando estaba llorando, mi niña de cinco años me dijo: Mami, ¿qué pasa? y le dije: Es que leí algo y asombrada me preguntó: ¿qué leíste? Le dije que dos personas se amaban mucho, que eso me ponía sentimental y me respondió: mami, uno no llora por eso, yo también te amo demasiado y no quiero que llores por eso... Y me dio un abrazo maravilloso... No se alcanzan a imaginar ese momento, gracias a este libro. Gracias, Pat por regalarme una maravillosa historia romántica, como siempre.
Ahora, si quedaron antojados de leerlo, pueden pasar por:
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