¡Hola! Ayer pensaba escribirte pero, no me dejaron... De verdad te extraño y demasiado, diría yo... La verdad es que considero de suma importancia contarte que tuve un sueño... Soñé contigo. Soñé que éramos novios, como siempre lo sueño, como siempre lo quiero, como siempre deseo que sea pero... Pero, luego despierto y veo que como siempre... Sólo fue un sueño.
Qué diferente es mi vida desde que no estás. Qué difíci es vivir si no es para tí... Qué difícil es respirar sin darte alientos a tí. Qué difícil es darme cuenta de que puedo ver cuando no tengo tu presencia para disfrutarla. Qué difícil es levantarme cada mañana a amarte sin que tú puedas al menos enterarte o difrutar aunque sea de una millonésima parte de ese amor...
Qué difícil es amar cuando no se es correspondido. Pero, es más difícil aún amar sin saberse correspondido o no.
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